Escrito: de
1919
Fuente digital de esta edicion: en el Mia.org
Traduccion: Matteo David, junio 2016.
Según el informe, Majno disparó al llamado'ataman' Grigoriyev cuando se conocieron. La razón fue que Grigoriyev actuaba en connivencia con los contrarrevolucionarios, no sólo con los petluristas sino también con los denikinistas. Este informe aún no ha sido confirmado: los rumores más fantásticos son difundidos por los grupos y bandas rebeldes, y lo que dicen debe ser comprobado diez veces antes de ser creído.
Sin embargo, supongamos que este informe está confirmado. ¿Qué significa esto?
Majno se convenció de que Grigoriyev no era más que un sucio bandido contrarrevolucionario contratado, por lo que decidió poner fin a Grigoriyev. Ni una sola persona honesta querrá discutir o expresar su pesar al respecto: después del asesinato de Grigoriyev hay un sinvergüenza menos en el mundo, y eso es todo lo que hay. Bueno, pero si hablamos del propio Majno, mucha gente preguntará? ¿Tiene intención de hacer algo más?
Durante un tiempo, Grigoriyev quedó atrapado en la revolución obrera y campesina y nadó con la corriente. Luego se pronunció en contra de la revolución, porque no estaba dispuesto a someterse a la disciplina de la Ucrania obrera y campesina. Grigoriyev dirigió su banda contra el Ejército Rojo. Pero entonces su completa impotencia fue expuesta. Grigoriyev fue golpeado en la batalla y su banda se disolvió, parte de la cual se rindió y otra parte se interno en el bosque. Al ver lo indefenso que estaba, Grigoriyev comenzó a buscar a alguien en quien apoyarse, alguien con quien unirse, para hacerse más fuerte. En Ucrania, como en toda Rusia, ahora sólo hay dos fuerzas: la organización revolucionaria de los obreros y campesinos, unidos por el poder soviético, por un lado, y, por otro, la organización terrateniente-burguesa encabezada por Kolchak y Denikin. Quienquiera que vacile entre estos dos campos es insignificante e impotente.
Habiendo roto con el campo soviético, Grigoriyev inevitablemente comenzó a buscar vínculos con el campo de Denikin.
Esto asustó a Majno. No quiere unirse a los contrarrevolucionarios pero, al igual que Grigoriyev, Makhno también ha roto con el campo de la revolución. Se escapó de las filas del Ejército Rojo, violó su disciplina, le causó un daño inconmensurable y ahora está construyendo una especie de fuerza propia.
Esto simplemente demuestra que Majno no puede sumar dos y dos. Si él entendió la banalidad del Grigoriyevismo, también debería entender la naturaleza fatal del Majnovismo. Porque estos son sólo diferentes peldaños en una misma escalera, que conduce al abismo.
Entre los atamanes y batkos rebeldes hay dos categorías de personas: hay bandidos, pícaros, veneradores, pero también hay hombres honestos que no pueden unir dos y dos.
Grigoriyev dañó al Ejército Rojo por su profesionalismo, codicia y venalidad. Es muy posible que Majno sea inocente de todos esos pecados, pero él también ha hecho un daño espantoso al Ejército Rojo, ya que actuó de acuerdo con el falso programa anarquista-rebelde. Y el majnovismo sigue siendo hoy en día un veneno que ha infectado a las unidades atrasadas del ejército ucraniano. Al matar a Grigoriyev, quizás Makhno ha apaciguado su conciencia, pero no ha expiado por ello sus crímenes contra la Ucrania obrera y campesina. Si Majno y los demás guerrilleros realmente quieren abandonar el camino del Grigoriyevismo, regenerarse y defender la revolución, sólo hay una manera: declarar abiertamente que renuncian, de una vez por todas, a la desorganización, al atamanismo y a la obstinación, y ponen sus fuerzas, como soldados disciplinados, total y absolutamente a disposición del poder obrero y campesino en Ucrania. ●
León Trotsky
El 4 de agosto de 1919. En la estación Lubny, "En el camino", No.75