Escrito: 12 de mayo de
1919
Fuente digital de esta edicion: en el Mia.org
Traduccion: Matteo David, mayo 2019.
La revuelta de un sector de los cosacos del Don ya se ha prolongado durante varias semanas. Esta revuelta fue incitada por los agentes de Denikin, oficiales contrarrevolucionarios. Encontró apoyo entre los Kulaks Cosacos. Estos kulaks atrajeron a una parte considerable de los cosacos campesinos medio. Es muy posible que en algunos casos los cosacos hayan sufrido algunas injusticias a manos de unidades militares particulares que pasaban por su territorio o de representantes individuales del poder soviético. Los agentes de Denikin pudieron explotar estas injusticias para avivar la llama de la revuelta. Los bribones de la Guardia Blanca se disfrazaron en esta región de partidarios del poder soviético, para que m%aacute;s facilmente se abrieran camino en la confianza de los Cosacos campesinos medio. De esta manera, el engaño contrarrevolucionario, los intereses kulaks y la ignorancia de las masas se unieron por un momento en una insensata y criminal revuelta en la retaguardia de nuestros ejércitos en el frente sur.
Una revuelta en la retaguardia es para un soldado como un forúnculo en el hombro de un trabajador. Para luchar, para defender el territorio soviético, para aplastar a las ordas de propietarios Dinikinistas, es necesario es necesario tener una retaguardia confiable, tranquila, amistosa entre obreros y campesinos y cosacos obreros. Por lo tanto, la tarea más importante del momento es liberar al Don de la revuelta y de los rebeldes.
La autoridad soviética central ha decidido que en el menor tiempo posible, este resuelto. Los refuerzos esplendidos se trasladan a respaldar a las fuerzas expedicionarias que operan en contra de la revuelta innoble contrarrevolucionaria. Nuestros mejores organizadores son trasladados allí para asegurar el cumplimiento de esta tarea urgente.
Es necesario acabar con la revuelta. Nuestros soldados del Ejército Rojo deben estar imbuidos de comprensión de que los rebeldes de Beshinskaya o Yelanskaya o stanitsa Bukanovskaya ayudan directamente a los Generales de la Guardia Blanca Denikin y Kolchak. Cuanto más tiempo se prolongue la revuelta, mayor será las bajas en ambos bandos. Sólo hay una manera de reducir el derramamiento de sangre: propinar un golpe rápido, fuerte, rotundo.
Acabemos con la revuelta. Tenemos que lanzar la furia sobre el hombro y cauterizar con un hierro al rojo vivo. Entonces, el arma del Frente Austral será liberada para asestar el golpe mortal al enemigo. ●
El 12 de mayo de 1919
Kozlov
'En el camino', No.44