Partido Comunista de Nepal (Maoísta)

 

Estrategia y Táctica de la Lucha Armada en Nepal

(Documento adoptado por el Tercer Pleno del Comité Central)

 

 


Redactado: Para el III Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Nepal (Maoísta) de marzo de 1995.
Publicado: En inglés, en The Worker, órgano del Partido Comunista de Nepal (Maoísta), No. 3 (feb. 1997), págs. 19-30, con el título de "Document: Strategy and Tactics of Armed Struggle in Nepal".
Traducción al Castellano: Debate y documentación sobre Nepal, 2007. 
Esta edición: Marxists Internet Archive, noviembre de 2009.


 

 

TRASFONDO HISTORICO

 

Cuando analizamos la historia de Nepal desde la perspectiva materialista histórica, puede inferirse fácilmente que el pueblo nepalés ha estado luchando contra las complejidades de las fuerzas naturales y diversos problemas creados por el hombre, para su propia supervivencia y desarrollo. El Nepal moderno se ha desenvuelto a través de la lucha entre, por una parte, la gente sencilla, inocente luchando por vivir pacíficamente en empinadas cuestas con sus sistema económico natural y su cultura tribal, y de la otra, los hindúes que periódicamente han incursionado en nuestro país desde el sur especialmente desde hace cerca de mil años con su superior tecnología de producción y arte de la guerra luego de que fueran derrotados por los musulmanes. En este proceso histórico el surgimiento de príncipes y caudillos y la lucha que mantuvo las riñas entre ellos obligó al pueblo a entrenarse en la lucha violenta, lo que ha sido demostrado por la historia. El pueblo nepalés que ha adquirido destreza militar y de combate en el curso de su desarrollo histórico pudo combatir valientemente en el último período contra los británicos en el sur y contra los chinos en el norte quienes estaban mejor equipados con conocimiento, técnica y armamento modernos. En las batallas combatiendo por su propia soberanía los niños, los ancianos, las mujeres, los jóvenes han demostrado sacrificios, valor y habilidad sin precedentes sobre la base de armas y equipos hechos en su propio país. Esto aterrorizó incluso a grandes ejércitos imperialistas y a sus comandantes y estableció al pueblo nepalés (Gorkhali) como uno de los mejores combatientes del mundo. Incluso hoy cualquier nepalés independiente se sentirá orgulloso cuando recuerda la destreza en el combate, la valentía y el sacrificio del pueblo nepalés en la historia pasado. Es cuestión de no menos orgullo que incluso Carlos Marx, el proponente de la ideología comunista y líder del proletariado mundial, también haya apreciado el sacrificio, la valentía y la destreza mostrados por el pueblo nepalés en aquellas guerra.

Sin embargo, desde el punto de vista del liderato, incluso ayer y hoy el imperialismo extranjero y sus perros de presa, la clase reaccionaria gobernante local, han convertido conspirativamente al bravo pueblo nepalés en soldados mercenarios. Para nosotros es necesario pasar este legado histórico al pueblo a través de la lucha y animarlos a tomar su destino en sus propias manos.

Aquí, incluso después del desarrollo del Estado nepalés centralizado, el pueblo nepalés ha estado combatiendo y oponiéndose a su manera contra las atrocidades desatadas por las clases dominantes, especialmente los Ranas y los Shahas. Han sido notables los muchos choques dentro de las diferentes clases dominantes así como la rebelión de Lakhan Thapa contra los Ranas. Con el telón de fondo de la creciente rebelión y conciencia popular en todo el mundo en la época de la II Guerra Mundial el pueblo nepalés también comenzó a combatir violentamente contra la opresión perpetuada por las clases dominantes. En este proceso, tuvo lugar el nacimiento del Partido Comunista en Nepal y Nepal entró en una etapa de revolución de Nueva Democracia contra el feudalismo y el imperialismo. El pueblo de diferentes partes del país se levantó para combatir con las armas contra las clases dominantes expansionistas indias, sus secuaces en el Congreso nepalés, y el rey feudal que habían conspirado para aplastar el movimiento popular a través del acuerdo de Delhi. A este respecto, es notable la rebelión armada que tuvo lugar en Bhairahawa. Incluso después de ésta el pueblo continuó involucrándose en pequeñas o grandes luchas rompiendo la ley y administración reaccionarias. Comenzaron a tener lugar conflictos armados contra los tiranos feudales locales en diferentes lugares.

De entre este tipo de rebelión armada contra el feudalismo y el expansionismo, la rebelión armada que se dio bajo el liderato de Bhim Datta Pant en el occidente de Nepal es históricamente importante. No fue menos importante, en el mismo año 1952-53, la forma en que Bhim Datta Pant conformó cientos de escuadrones armados, la forma en que pudo aniquilar funcionarios gubernamentales corruptos, la forma en que pudo capturar granos de los graneros del gobierno así como otros elementos esenciales y distribuirlos entre los campesinos pobres y hambrientos, y la forma en que pudo atacar a los tiranos feudales uno tras otro. El mismo hecho de que estuvo más allá de la capacidad del gobierno nepalés sofocar esta rebelión demuestra claramente qué tan popular y poderosa fue. Miles de tropas indias fueron llamadas a ingresar para sofocar esta rebelión y el líder fue asesinado de la manera más horrenda e inhumana. Es desde ese período en adelante que la actual clase dominante ha mostrado su carácter antinacional, capitulacionista y fascista.

Durante este período los campesinos aliados con el Partido Comunista comenzaron a combatir contra la explotación feudal en diferentes distritos del país. De estas, tuvieron especial importancia la rebelión campesina que se desarrolló en Bara, Parsa y especialmente en Rautahat. Miles de campesinos desafiaron la ley y la administración para destruir los contratos que los ligaban a los tiranos feudales locales, destruir los graneros, iniciar un movimiento cultural para desairar el orgullo de los feudales, para iniciar así las luchas violentas. Los campesinos estuvieron a punto de tomarse el Poder local llevando a que muchos terratenientes feudales huyeran aterrorizados. Sin embargo, es una cuestión de triste preocupación que el entonces liderato del Partido Comunista en vez de analizar la rebelión armada y guerra de clases campesina que estaba teniendo lugar en diferentes partes de Nepal y sin explorar la potencialidad de librar una guerra de guerrillas, la condenó como extremismo, y llevó a la rendición ante el rey. Trató de limitarse a la lucha legal y pacífica y a trabajar dentro del sistema parlamentario. Esta fue una traición histórica en la dirección del revisionismo que iría a tener un impacto a largo plazo en el movimiento comunista nepalés.

Incluso después de eso la rebelión popular siguió adelante. Las rebeliones campesinas de diverso tipo continuaron. En este período vale la pena mencionar la larga lucha campesina contra los feudales en Khaniyavas de Dhading y la de Dang. Luchas ilegales grandes y pequeñas continuaron contra la firma del tratado Gandak por el autoproclamado elegido gobierno del Congreso nepalés en el año 1959 y contra los lamesuelas de los expansionistas indios. También se vieron incidentes de luchas violentas en diferentes lugares contra el golpe real de 1960 y contra el sistema Panchayat sin partidos. En este período el movimiento de estudiantes y jóvenes izquierdistas continuó a pesar del encarcelamiento, represión y terror desencadenado contra ellos.

La lucha armada de 1972-73 en Jhapa siguiendo lineamientos de guerra popular prolongada librada en rebelión contra el revisionismo de derecha prevaleciente en el movimiento comunista, es la lucha que más vale resaltar. Esa rebelión sin duda representa la tendencia y el espíritu revolucionarios. Aquellos que han sido martirizados en el proceso de establecer conscientemente la república de Nueva Democracia son mártires inmortales. Aunque hubo profundas deficiencias en el liderato en términos de tendencias mecanicistas pequeñoburguesas y aventureras de “izquierda”, fue sin embargo una trascendental rebelión contra el dominio autocrático feudal del rey y contra las derechistas tendencias reformistas que se habían atrincherado profundamente en el Movimiento Comunista Nepalés. En la lucha armada en pos de la revolución de Nueva Democracia, los mártires de la rebelión de Jhapa estarán en la vanguardia.

Por esta época, las intensas luchas contra los feudales y explotadores en Terai oriental consistente de Sarlahi, Mahottari, Sihara, Dhanusha y Sindhuli han establecido un nuevo récord en la historia del movimiento campesino. En este proceso, también, cientos de miles de agricultores bajo el liderato del Partido se involucraron en la lucha de clases que dio lugar a una especie de vacío de poder en las aldeas. Puede verse claramente que hubo una posibilidad de iniciar el proceso de guerra de guerrillas sobre la base de las luchas campesinas de ese período. Sin embargo, debido a la línea reformista y las pretensiones pequeñoburguesas del partido, los campesinos quedaron indefensos ante la carnicería de la reaccionaria operación militar. Durante esa época muchos valientes hijos del movimiento revolucionario nepalés fueron martirizados.

En medio de esto, en Chitawan, tuvieron lugar luchas campesinas, entre ellas las de Jugedi. Incluso en esa rebelión fueron martirizados muchos jóvenes campesinos. El histórico movimiento estudiantil de 1979 tomó la forma de movimiento popular por todo el país. En este proceso tuvo lugar el desarrollo de violentas luchas campesinas en todo el país. Esto produjo la oleada de grandes luchas campesinas en los distritos de Terai oriental mencionados anteriormente y otros incluyendo Chitawan, Dang y Bardiya. Diferentes sectores del pueblo incluyendo campesinos se involucraron en la lucha en todo el país contra el Panchayat y la monarquía desafiando las leyes y administración reaccionarias. El rey fue obligado a conceder una opción alternativa contra el Panchayat sin opciones debido a la fuerzas de la violenta lucha del poder popular. Aunque detrás de esto hubo una inherente conspiración tramada por el rey y las fuerzas monárquicas. Incluso después de eso la tendencia de lucha popular avanzó más fortaleciéndose día a día por el nacionalismo, la democracia y el nivel de vida del pueblo.

El histórico movimiento popular de 1990 se convirtió en la expresión central de todos estos movimientos. Aquí, junto con los incontables conflictos violentos en todo Nepal incluyendo la capital, comenzó a avanzar el movimiento para acabar con el sistema monárquico. En esta lucha histórica, centenares de valientes hijos e hijas de Nepal perdieron sus vidas. Sin embargo los reaccionarios locales y extranjeros incluyendo los derechistas reformistas, con el fin de limitar las reformas llegaron a un compromiso con el rey contra el (alto) nivel y el espíritu del movimiento logrando éxito en su conspiración por descarrilar el movimiento. Es claro que el fin del sistema sin partidos de Panchayat y el establecimiento del sistema multipartidario bajo la dirección del rey es también resultado de la lucha violenta del pueblo.

Incluso después del establecimiento del sistema multipartidario, grandes sectores del pueblo están aún en el proceso de lucha por la nacionalidad, la democracia y el nivel de vida del pueblo. En este período también hemos visto claramente, en el curso de los movimientos legales en general bajo nuestro liderato, que el pueblo está deseoso de darles pleno apoyo con gran entusiasmo cuando hay ataques directos contra el Estado reaccionario y hay choques violentos. Dentro del corto período del establecimiento del sistema multipartidario centenares de nepaleses han perdido sus vidas en pos de la liberación y sus derechos, en estas luchas también cayeron un importante líder de nuestro Partido de Dhanusha y otros cuadros de todo el país.

Las luchas clasistas del campesinado en los montañosos distritos del occidente, particularmente en Rolpa y Rukum, representan el alto nivel de lucha revolucionaria antifeudal y antiimperialista. A pesar de los severos represión y terror reaccionarios el movimiento no sólo siguió manteniéndose, sino que también está avanzando como un movimiento de resistencia con el salto cualitativo. Esa lucha ha dado nacimiento a algunas nuevas cosas en el movimiento comunista nepalés que nos han inspirado a ser más serios sobre la cuestión de la lucha armada.

De la anterior reseña histórica puede concluirse que:

1. La propaganda reaccionaria sobre el que el pueblo nepalés es amante de la paz y que no le gusta la violencia es absolutamente falso. Es un hecho incontrovertible que el pueblo nepalés ha librado luchas violentas por sus derechos desde tiempos históricos.

2. Hasta hoy, detrás de toda reforma general que ha sido lograda por el pueblo nepalés ha estado la fuerza de luchas violentas e ilegales del pueblo.

3. El pueblo nepalés es muy consciente y sensible sobre la cuestión del nacionalismo y se sienten orgullosos de dar sus vidas combatiendo en vez de someterse a las presiones de los extranjeros.

4. Desde el año 1951 hasta hoy, principalmente los campesinos nepaleses y otros sectores del pueblo se han alistado en incontables conflictos violentos y armados contra el Estado reaccionario y ha siso muy fuerte el sentimiento anti-establecimiento entre el pueblo nepalés.

5. El pueblo nepalés son grandes guerreros en el mundo que son conocidos por su capacidad de resistir audazmente las severas penurias en el combate.

6. Los reaccionarios locales y extranjeros incluyendo los elementos revisionistas han estado una y otra vez conspirando contra la tendencia a la lucha del pueblo nepalés. Hoy, sobre los revolucionarios ha recaído la mayor responsabilidad de iniciar la lucha armada metódica y conscientemente contra el feudalismo y el imperialismo para completar la revolución de Nueva Democracia representando ese gran legado histórico.

 

 

EL MOVIMIENTO COMUNISTA NEPALES Y LA CUESTION DE LA LUCHA ARMADA

 

En el desarrollo de la lucha de clases en la sociedad nepalesa, el establecimiento del Partido Comunista en el año 1949 representa un importante logro histórico para el proletariado de Nepal. Aunque el Partido no había podido captar la esencia y la importancia de la lucha armada, fue posible tomar una clara posición política para luchar por la revolución de Nueva Democracia contra el feudalismo y el imperialismo. De este modo, con todas las cualidades de su infancia (inmadurez), llevó a cabo propaganda y agitación desde el punto de vista comunista sobre la cuestión de la nacionalidad, la democracia y el nivel de vida del pueblo e intentó levantar a las masas principalmente en las zonas rurales contra el feudalismo. Debido a este proceso, en un corto período el pueblo de diferentes partes del país fue atraído hacia la política comunista, y la lucha campesina comenzó a extenderse e diferentes lugares. Entre éstas, el movimiento campesino en Terai tiene especial importancia. Debido al desarrollo de las luchas campesinas, surgió en términos concretos en el Partido la cuestión de la correcta línea política. Pero el liderato de entonces en el Partido no solo fracasó completamente en dirigir la lucha en una dirección revolucionaria sino que también en el año 1955 decidió limitarse a actividades pacíficas de propaganda por el socialismo, bajo la monarquía feudal. De ese momento en adelante, el movimiento comunista nepalés estuvo abiertamente dominado por la línea desviacionista de derecha. Después de esto, durante un largo tiempo el Partido se encontró completamente sumergido en actividades pacíficas, parlamentarias y reformistas.

Incluso cuando en el año 1960 el rey impuso el régimen autocrático en el país al prohibir todos los partidos políticos el liderato del Partido que había estado sumergido en el reformismo se limitó a diversos tipos de consignas parlamentarias parecidas a las de otros partidos reaccionarios, en vez de proponer consignas políticas y formas de lucha revolucionarias. En esta misma coyuntura, el gran debate entre China y Rusia y el desarrollo de la Gran Revolución Cultural Proletaria bajo el liderato del Camarada Mao, inició un debate a su manera sobre la necesidad de la lucha armada y la importancia de luchar contra el revisionismo. Un sector del Partido siguió abiertamente al revisionismo ruso y comenzó a desenmascararse completamente ante el pueblo. La mayor parte de la vieja generación del liderato del Partido apoyó al Camarada Mao y a China y el camino de la revolución de Nueva Democracia contra el revisionismo ruso. Pushpa Lai en su documento en la Conferencia de Gorakhpur incluso escribió: “es imposible establecer este tipo de sistema sin librar la revolución armada prolongada”. (Moolbato, pág. 66).

Sin embargo, incluso entonces, el liderato de la vieja generación de ese período no pudo desarrollar desde el punto de vista táctico la línea política concreta para la revolución y fracasó completamente en determinar formas de lucha revolucionarias para lograrlo. A este respecto el liderato del IV Congreso demostró suma confusión sobre el camino básico de la revolución planteando consignas incluso más ilusorias y claramente reformistas y hablando de “rebelión campesina armada”. En esencia, en términos de línea política, este sector habló algo de revolución, sin embargo en la práctica asumió un carácter reformista y se movió en una dirección seudoreformista.

A este respecto, luego de la lucha armada campesina de Naxalbari iniciada bajo el liderato del Camarada Charu Majumdar en la India tras rebelarse contar el reformista PCI-M, se vio su clara influencia entre los jóvenes revolucionarios de Jhapa en la parte oriental de Nepal. De igual manera incluso aquí algunos jóvenes entusiastas y revolucionarios de la región oriental pasaron a acciones armadas declarando lucha armada bajo la estrategia de guerra popular prolongada rebelándose contra el revisionismo que se había arraigado profundamente en el Partido. A pesar de las serias deficiencias debido al pensamiento mecanicista pequeñoburgués y al aventurerismo de “izquierda”, la acción armada fue una histórica rebelión que creó escozor entre los revisionistas en el movimiento comunista nepalés y en la estructura feudal del Estado del rey. Al menos la cuestión de la lucha armada se convirtió en un tópico de gran debate en el movimiento comunista. La lucha de Jhapa jugó un importante papel en intensificar la lucha interna entre los revolucionarios y los oportunistas emergentes dentro de los grupos seudoreformistas que seguían una línea reformista. El debate sobre si aceptar la línea de la lucha armada o no comenzó a darse a su manera dentro de los grupos IV Congreso, Pushpa Lal, Manmohan, Rohit y otros grupos.

La mayoría de los líderes reformistas de estos grupos le dieron ilusiones a un gran sector de fuerzas de la izquierda revolucionaria al aceptar la necesidad de la lucha armada en términos abstractos y para el futuro, pero se mantuvieron lanzando ataque antagónicos contra la actual chispa de revolución encendida por las acciones armadas. En esta cuestión, el grupo IV Congreso encabezado por Mohan Bikram estuvo en las líneas de frente atacándola violentamente. La esencia revisionista de Mohan Bikram, conocido por lanzar un destructivo ataque contra los revolucionarios de izquierda de la lucha de Jhapa y dándole preferencia a promover a Man Mohan Adhikari, el renegado pro-monárquico, como presidente del Núcleo Central, no ha cambiado y está bien reflejada incluso hoy en su análisis de MLU como una fuerza amiga incluso cuando degeneró en reaccionaria y en su práctica hacia nuestro Partido.

Debido a la intensa represión por parte de las fuerzas reaccionarias, y al fuerte ataque por parte de los conocidos seudoreformistas y principalmente debido a la concepción pequeñoburguesa mecanicista y aventurera de “izquierda” del liderato, la rebelión de Jhapa no pudo desarrollarse en guerra popular. Como resultado de la infiltración de fuerzas incompatibles de diferentes grupos, junto con la lenta degeneración del liderato de la rebelión de Jhapa en revisionismo de derecha, hoy ellos incluso han llegado al grado de pertenecer al reaccionario gabinete ministerial del rey. Sin embargo, aun continúa el proceso de construcción de una tendencia revolucionaria mediante la rectificación de los errores del pasado. Algunos líderes de ese período están todavía hoy levantando la bandera de la rebelión contra el reformismo y la reacción a pesar de los largos encarcelamientos, la tortura y las tentaciones.

Debido a la situación nacional e internacional contemporánea y a la influencia de la lucha de Jhapa, se incrementó el debate y la lucha interna dentro de IV Congreso con respecto a la cuestión de la consigna política y la línea de la lucha armada. A pesar de la falta de claridad teórica y política respecto a la lucha armada, el inmortal mártir Camarada Azad también jugó un papel en este debate. Finalmente, tras una larga y compleja lucha las auténticas fuerzas revolucionarias dentro del Partido se las arreglaron para salvarlo de los representantes del seudoreforismo, Mohan Bikram y Nirmal Lama, proponiendo la consigna revolucionaria por el Poder político y la inevitabilidad de la guerra popular prolongada para lograrlo. Hoy han tenido éxito en forjar la alternativa revolucionaria en el país mediante la asimilación de las actividades revolucionarias del pasado (incluyendo la lucha de Jhapa) del movimiento comunista nepalés. El Congreso de Unidad del Partido ha desarrollado un claro punto de vista sobre esta cuestión. En este momento de la historia tenemos que admitir en términos inequívocos que aún tenemos que materializar en la práctica lo que hemos formulado correctamente en la teoría respecto a la consigna política general y al camino a seguir. La razón tras esto, además de las complejidades de la situación y la lucha interna, es que el Partido aún tiene que curarse de la enfermedad pequeñoburguesa de la revolución de palabra pero oportunismo en la práctica. Es necesario hacer un plan concreto para pasar a la tarea de la lucha armada haciendo este tipo de autocrítica.

 

 

CARACTER, OBJETIVOS Y FUERZA MOTRIZ DE LA LUCHA ARMADA EN NEPAL

 

Según las directivas teóricas del MLM y las particularidades generales de la sociedad nepalesa nuestro Partido ha formulado una estrategia política de completar la revolución de Nueva Democracia con una dictadura democrático-popular bajo la dirección del proletariado basada en la unidad de obreros y campesinos contra el feudalismo y el imperialismo. El objetivo a largo plazo del Partido es avanzar hacia la revolución socialista tras la exitosa culminación de la revolución de Nueva Democracia como parte de la revolución proletaria mundial socialista y lograr el comunismo librando revoluciones culturales basadas en la teoría de continuar la revolución bajo la dictadura del proletariado. Es claro que el carácter y orientación de la lucha armada nepalesa estará dirigida y comprometida hacia el logro de esta estrategia política. En conformidad con esto, el carácter y orientación de la lucha armada nepalesa han sido claramente especificados por el Congreso Nacional de Unidad del Partido como “La línea de guerra popular prolongada basada en la estrategia de rodear las ciudades desde el campo”.

 

Blancos de la Lucha Armada

El objetivo de la lucha armada es resolver las contradicciones básicas entre el feudalismo y el pueblo nepalés, el imperialismo —principalmente el expansionismo indio— y el pueblo nepalés, el capitalismo comprados-burocrático y el pueblo nepalés, y en el plazo inmediato la contradicción entre la reacción local que está conformada por una combinación de clases feudal y capitalista compradora-burocrática respaldadas por el expansionismo indio, y el pueblo nepalés. De esta forma es claro, el objetivo de la lucha armada será confiscar las tierras de los feudales y terratenientes y distribuirla entre los campesinos pobres y sin tierra sobre la base la teoría de la tierra para el que la trabaja, y atacarlos con este propósito, y con el fin de cortar las raíces de la explotación imperialista, los proyectos tales como industrias, bancos, etc., en manos de los capitalistas compradores y burocráticos y proyectos dirigidos por organizaciones gubernamentales y no gubernamentales y atacarlos por los mismo.

De esta forma es claro que los blancos de la lucha armada serán los feudales, terratenientes y capitalistas compradores y burocráticos.

 

Fuerzas Motrices

(A) El proletariado: Es la fuerza motriz fundamental de la revolución de Nueva Democracia. Aunque la fuerza numérica de los trabajadores proletarios en las modernas industrias y fábricas de Nepal es pequeño, sin embargo, está creciendo. Aunque el número es pequeño, esta clase, que está completamente alienada de los modernos procesos de producción y fuerzas productivas, es la clase más revolucionaria de la sociedad. Para el éxito de la revolución de Nueva Democracia, esta clase tiene la responsabilidad histórica de identificar y dar liderato a las otras clases aliadas.

(B) Los trabajadores agrícolas, peones, campesinos sin tierra, agregados, y campesinos pobres y en nuestro caso en las ciudades los carretilleros, cargadores de triciclos, conductores de taxis y trabajadores del transporte y de hoteles, etc., constituyen el sector más confiable, consistente de un gran sector de la población y la principal fuerza motriz de la revolución de Nueva Democracia nepalesa. (Aquí, ‘campesinos pobres’ hace referencia a aquellos campesinos que no pueden obtener sus subsistencia sólo de sus tierra).

(C) Campesinos medios: Aquellos que viven con dificultad incluso después de trabajar duro en su tierra todo el año y que también toman algo de tierra en contrato o sobre la base de dividir la cosecha. En las regiones montañosas de Nepal estos campesinos son más numerosos que las otras clases. Para la Revolución de Nueva Democracia esta clase es un importante fuerza motriz.

(D) Campesinos ricos: Aquellos que pueden tener buen nivel de vida por medio de su tierra; pueden emplear a uno o dos trabajadores en su trabajo a pesar de su propia participación en su trabajo agrícola y pueden acumular parte del ingreso mediante la explotación. Esta clase es un aliado vacilante para la revolución de Nueva Democracia.

(E) Clase pequeño-burguesa: En esta clase están incluidos los maestros de escuelas y colegios, estudiantes, médicos, ingenieros, abogados, empleados de oficina de bajo rango, pequeños comerciantes de los pueblos, comerciantes al detal, artesanos, etc. Debido al carácter y condiciones de su proceso de producción esta clase se mantiene vacilante. A pesar de esto esta clase puede jugar un importante papel auxiliar para la revolución de Nueva Democracia. Hoy los imperialistas y las fuerzas reaccionarias están centrando sus atención en mantener a los intelectuales de esta clase apartada de la revolución.

(F) Burguesía nacional: En Nepal aunque ésta (la burguesía nacional) no tiene un papel independiente, lentamente está tomando forma. Este tipo de capitalistas que están involucrados en las pequeñas industrias modernas manufactureras y el comercio están por una parte soñando con amasar riqueza explotando a los trabajadores y por la otra están siendo dominados por los capitalistas compradores y burocráticos monopolistas. De ahí que ellos naturalmente muestran un carácter contradictorio hacia la revolución. Acostumbrada a cambiar su carácter según la situación, esta clase se mantendrá como una aliado vacilante de la revolución.

Es obvio que la lucha armada nepalesa formulará sus estrategia y factores tomando en consideración las anteriores condición general y carácter de los enemigos y las fuerzas motrices de la revolución de Nueva Democracia.

 

 

EL PROBLEMA DE LA ESTRATEGIA Y LA TACTICA DE LA LUCHA ARMADA EN NEPAL

 

En la actual época del imperialismo y la revolución proletaria, el enemigo de clase está practicando diversas formas de estrategias conspirativas para detener la revolución en países como el nuestro. Entre ellas debemos centrar nuestra atención en las siguientes debido a que no podemos llegar a una correcta estrategia sin comprender la estrategia del enemigo.

1. Debido a su control monopolista sobre la comunicación por todo el mundo en esta época, el enemigo está lanzando una campaña de desinformación con deliberada propaganda de ‘terrorismo’, ‘caída del socialismo’ y la superioridad y el éxito del capitalismo y tratando de reducir la moral del pueblo mediante la estrategia de guerra psicológica.

2. Esta desencadenando una fuerte guerra cultural mediante la inundación de cultura y literatura vulgar con el fin de distorsionar las mentes y almas del pueblo.

3. Todas las fuerzas imperialistas y las clases dominantes reaccionarias de cada país están haciendo campaña estratégicamente extendiendo la red de espías bien entrenados y técnicamente equipados y tratando de infiltrarse en el partido revolucionario para recoger información, crear ilusiones dentro del partido, hacer actividades destructivas y arrestar o asesinar a los auténticos líderes o activistas revolucionarios del Partido.

4. Están inventando nuevas formas de reformas y democracia con el fin de confundir al pueblo políticamente.

5. Bajo la estrategia de impedir la revolución en un país como el nuestro ha siso extendida la red de ONG y ONGI con el fin de reclutar a alguna gente instruida de la clase media, impedirles caer a niveles por debajo de esta clase y atrapar al pueblo en el pantano de las pequeñas reformas.

6. Están animando a los jóvenes desempleados a dispersarse por todo el mundo y a vagar en la India a nombre del desempleo. Los jóvenes están siendo usados como soldados mercenarios en ejércitos extranjeros.

7. Los imperialistas están envenenando las mentes del pueblo mediante la propagación de la religión y otros medios luego de entrar en zonas rurales con consignas atractivas.

8. Si a pesar de todas éstas y otras innumerables trampas el movimiento revolucionario asciende entonces ellos inician una campaña de atroz genocidio a través de sus poderoso ejército permanente. En resumen, en la actual época la estrategia del enemigo del pueblo es la de guerra total.

En tal situación la estrategia de un partido revolucionario que quiere avanzar con la lucha armada para hacer la revolución también debe estar claramente basada en guerra total. Es necesario que adoptemos la estrategia y táctica de golpe por golpe contra las fuerzas imperialistas y reaccionarias, uniendo a todo el pueblo en todas las esferas de la vida nacional e internacional. El arma ideológica del MLM que ha demostrado ser exitosa para destruir al enemigo es un arma invencible del proletariado. A la luz de esto es necesario determinar la estrategia y la táctica de la lucha armada nepalesa centrando en el estado general de los enemigos junto con las particularidades básicas de Nepal y la sociedad nepalesa.

1. Nepal es un país sin salida al mar que está rodeado por tres lados por la India expansionista y en el norte rodeada por la China reformista. Aunque es pequeño en términos de área, sin embargo, con excepción del 17% de las planicies de Terai, el resto del país está geográficamente repleto con remotas colinas y montañas Himalayas con diferentes climas, grupos étnicos, culturas y lenguas.

2. En Nepal durante un largo período, ha existido un Estado reaccionario centralizado equipado con un moderno y poderoso ejército permanente y una burocracia. Los enemigos del pueblo nepalés están no sólo dentro del país sino que también están presentes fuera de él en la forma de los imperialistas, especialmente los expansionistas indios.

3. El desarrollo económico y político de Nepal ha sido desigual. Nepal es predominantemente rural y los campesinos explotados que representan el 90% de total del pueblo está disperso en aldeas. El proceso de urbanización está aumentando sin embargo, debemos decir que aún es pequeño.

4. Los campesinos nepaleses y otros sectores de las masas han atravesado por un proceso de diferentes formas de lucha tanto locales como nacionales durante largo tiempo. Hay una extendida atracción hacia los comunistas entre el pueblo. Sin embargo, aquí también es fuerte la influencia del reformismo y el revisionismo de derecha. En Nepal virtualmente no ha habido experiencia directa de lucha armada bajo el liderato del Partido Comunista.

5. La reaccionaria clase dominante del semifeudal y semicolonial Nepal, donde existe un sistema monárquico medieval, está pasando por intensa crisis y esta crisis ha comenzado a manifestarse políticamente así como de manera seria.

6. Un gran sector del pueblo nepalés está disperso en diferentes países en busca de empleo, principalmente en la India para el ejército y otros tipos de trabajo.

Es a través de las anteriores particularidades que puede discernirse la política y la táctica de la lucha armada nepalesa. De la primera particularidad puede verse que para librar la guerra en Nepal no existe ni una gran área, ni ninguna posibilidad de usar algún mar, ni hay grandes selvas, ni hay posibilidad de ayuda o apoyo directo de otro país vecino. Sin embargo, la situación geográfica es más favorable para librar guerra de guerrillas con directo vínculo con el pueblo. Y debido a la lucha contra la opresión nacional de la mayoría de nacionalidades esto también dará buena base de masas para la guerra de guerrillas. La segunda particularidad muestra que no hay situación de choque militar directo entre las fuerzas enemigas por el poder político, así que las fuerzas armadas del pueblo podrían aprovechar para tomar un área definida. Esto muestra claramente que la lucha armada nepalesa no puede tomar la forma de guerra directa o de posiciones contar el enemigo al comienzo. Es necesario expandir la fuerza armada del pueblo atacando los puntos débiles del enemigo bocado a bocado y debilitándolo mediante ataques estilo guerrillero en áreas favorables para el pueblo. Cuando se ven juntas la primera y segunda particularidades se encuentra posible establecerse y sobrevivir independientemente en ciertas áreas específicas como en Ching Kang shan en China y expandirse de allí a tras áreas. La tercera particularidad muestra la posibilidad de iniciar guerra de guerrillas en diferentes partes del país y desarrollarlas tomando la revolución campesina como la columna vertebral centrando en las zonas rurales y confiando y uniéndose con los campesinos. La cuarta particularidad claramente muestra que el apoyo popular seguirá aumentando si los revisionistas de derecha son completamente desenmascarados y se sigue vigilantemente la táctica de la lucha armada. La quinta particularidad indica que el ritmo de desarrollo de la lucha armada para establecer el poder revolucionario alternativo del pueblo será más rápido e inspirará a adoptar audaces tácticas para lograrlo. Y la sexta particularidad demuestra la necesidad de movilizar al pueblo nepalés que trabaja en países extranjeros —principalmente los nepaleses que trabajan en la India— llevando a cabo trabajo político entre ellos y utilizando el área para suministro de diversas necesidadse para el éxito de la lucha armada en Nepal.

La síntesis de todas las particularidades muestra claramente que es imposible que la lucha armada en Nepal haga un rápido salto a una insurrección para derrotar al enemigo. Sin embargo, es completamente posible aplastar finalmente al enemigo mediante el desarrollo sistemático de la lucha armada nepalesa. Puede derivarse claramente de esto que la lucha armada nepalesa debe adoptar necesariamente una estrategia de guerra popular prolongada rodeando las ciudades desde el campo. También es claro que ese camino sólo puede recorrerse después de prestar atención a las particularidades de nuestro país.

Los principios fundamentales de este camino son: captar firmemente el hecho de que la guerra popular es la guerra de las masas, que sólo puede desarrollarse confiando en las masas y principalmente en los campesinos y que las masas son las hacedoras de la historia; reconocer la necesidad y la importancia de las fases de defensiva, equilibrio y ofensiva estratégicas de la guerra popular y hacer planes en concordancia aceptando el papel estratégico de la guerra de guerrillas como la principal forma de guerra en la fase inicial de defensiva estratégica; captar la importancia de desarrollar la guerra de guerrillas en guerra de posiciones y de establecer bases de apoyo para conquistar el Poder central; y sobre todo, en la dirección ideológica del MLM para establecer el liderazgo del Partido sobre el ejército y no permitir a ningún costo que surja una situación en la que el fusil controle al Partido. Es mediante la práctica de los principios estratégicos principales de guerra popular prolongada y absteniéndose de cometer errores que se pueden desenvolver las leyes de la guerra popular nepalesa. Es importante notar la verdad de que las leyes de la guerra sólo pueden aprenderse participando en la guerra. El objetivo estratégico y táctico general de la guerra es preservar las propias fuerzas y destruir las del enemigo. Por eso es por lo que es importante ser completamente claros desde el comienzo sobre las políticas necesarias para desarrollar la guerra popular nepalesa comprendiendo la situación nacional e internacional general y las particularidades mencionadas arriba.

En nuestra situación: dar prioridad al trabajo rural, pero no abandonar el trabajo urbano; dar prioridad a la lucha ilegal, pero no abandonar tampoco la lucha legal; dar prioridad a áreas estratégicas específicas pero no abandonar tampoco el trabajo relacionado con el movimiento de masas; dar prioridad a la lucha de clases en las aldeas, pero no abandonar tampoco la lucha a nivel nacional; dar prioridad a las acciones guerrilleras pero no abandonar la denuncia política y la propaganda; dar prioridad al trabajo de propaganda dentro del país pero no abandonar la propaganda a nivel mundial; dar prioridad a construir organización del ejército, pero no abandonar la construcción de organizaciones de frente; dar prioridad a la propia organización y a las propias fuerzas, pero no dejar a un lado el forjar unidad de acción, y obtener apoyo y ayuda del campo internacional. Es sólo aplicando cuidadosamente éstas políticas que puede iniciarse, mantenerse y desarrollarse la lucha armada. Ni siendo unilaterales ni dando igual énfasis a todo el trabajo puede iniciarse, mantenerse y desarrollarse la lucha armada en el actual contexto. Desde este punto de vista la guerra popular avanzará como guerra total.

El exitoso desarrollo de la guerra popular nepalesa será determinado por acciones descentralizadas basadas en una política central, lanzando acciones contra diferentes puntos aislados del enemigo y aplicando grandes fuerzas contra pequeñas fuerzas con el fin de obtener victorias rápidas, adoptando la táctica de golpear y retirarse, avanzando con acciones guerrilleras bajo el plan centralizado desde diferentes partes del país pero dando especial atención a áreas estratégicas específicas, y como Mao ha dicho, organizando y movilizando la mayor cantidad de gente posible, tan rápido como sea posible y tan bien como sea posible poniendo como central la cuestión de la conquista del Poder político.

 

 

ALGUNAS CUESTIONES IMPORTANTES RESPECTO AL INICIO DE LA LUCHA ARMADA

 

¿Cómo transformar un partido como el nuestro que ha sido durante largo tiempo utilizado para actividades reformistas y parlamentarias a pesar de una clara línea política, condiciones materiales favorables, apropiada y creciente base de masas, en un partido para la lucha armada? ¿Es posible transformarlo gradualmente mediante estudio, entrenamiento, lucha reformista, y lucha de resistencia en pequeña escala? ¿O para eso es necesario algún salto, una ruptura con el pasado, un paso decisivo o algún gran impulso? ¿Podrá nuestro Partido entrar en lucha armada suavemente, sin causar ningún daño a la estructura organizativa de la clase fundamental? ¿Luego del inicio de la guerra de guerrillas cuál será su consecuencia y el proceso de su desarrollo? ¿Respecto a esto, qué muestran la dialéctica marxista, la experiencia del movimiento comunista internacional y nuestra propia experiencia? Sin tener claridad sobre estas cuestiones no podemos iniciar la guerra de guerrillas.

El marxismo es una filosofía de lucha. La ley del desarrollo según la dialéctica marxista es que todo proceso de desarrollo en la naturaleza, la sociedad y el pensamiento humano tiene lugar en medio de lucha de opuestos y su obvio resultado tomará la forma de un salto. Todo pensamiento que ve el desarrollo de cualquier tipo como un esquema de adición - substracción ordinario y como evolución gradual sería denunciado como evolucionismo burgués por los marxistas. Es claro que la transformación de un proceso a otro proceso no tiene lugar gradualmente, sino mediante saltos, mediante cambio cualitativo, mediante revolución.

A este respecto Lenin dice: desarrollo es la lucha de opuestos; hay básicamente dos concepciones respecto al desarrollo —desarrollo en la forma de aumento - disminución y desarrollo como unidad de opuestos. Mao ha dado el nombre de evolucionismo vulgar al pensamiento que ve el desarrollo como aumento y disminución o como repetición y dijo a cambio que el resultado inevitable de la unidad y lucha de opuestos es el cambio —o salto— cualitativo. Esto lo formuló él como unidad-lucha-transformación.

Con respecto a la teoría del conocimiento, Mao desarrolló la teoría de los dos saltos, es decir, del conocimiento perceptivo al conocimiento racional, y del conocimiento racional a la práctica revolucionaria. De estos, Mao ha denominado el fenómeno del salto del conocimiento racional a la práctica revolucionaria como “sumamente importante”. Sobre esto Mao dijo:

“Sólo este salto —el primer salto de adquirir conocimiento, o los pensamientos, teorías, políticas, planes y medios cristalizados como reflejo del mundo objetivo externo, verifica lo correcto de los erróneo. No sólo esto —la única intención del proletariado para conocer el mundo es transformarlo”.

De este modo Mao ha enfatizado la necesidad e importancia del salto en el proceso de transformación del pensamiento en práctica.

Salto, cambio cualitativo y revolución no es evolución gradual, sino un estado de ruptura, o un estado de transformación de un opuesto en el otro. Como había señalado Mao sobre el cambio cualitativo, sus proceso, etc., hablando de que la revolución no es algo suave, sin sobresaltos, etc.

De esto es claro que la esencia de la dialéctica marxista sobre esta cuestión es: para transformar el pensamiento en práctica el lado consciente tiene que hacer un plan no de evolución gradual sino de un salto. Después de habernos formado una opinión sobre el carácter de la revolución nepalesa, las formas de lograrla sobre la base de comprender la condición material de desarrollo de a lucha de clases en la sociedad nepalesa y la situación internacional, no sería marxismo revolucionario y sería mero evolucionismo vulgar o reformismo pequeñoburgués si seguimos repitiendo en la práctica las vías de evolución gradual o de reforma. Es imposible transformar de un proceso a otro de manera gradual porque lo que se necesita es un salto cualitativo. De ahí que es sólo mediante el proceso de empuje, salto y cambio cualitativo que nuestro Partido, que no ha pasado a la lucha armada incluso después de haber desarrollado un pensamiento sobre ésta, se transformará en un Partido capaz de dirigir una lucha armada. Esto coincide con las experiencias pasadas y presentes del Movimiento Comunista Internacional.

Aparte de esto también debemos tener claro que este salto traerá un gran cambio en la estructura de un partido como el nuestro que tiene predominio de representantes de la clase pequeñoburguesa y que ha sido utilizado para trabajo reformista. Esto tampoco va a ser suave y fácil; habrá un gran cambio en la estructura general de clases del Partido debido al proceso de ingreso y salida de sus miembros. Este proceso se desenvolverá en medio de grandes pérdidas y logros. En este proceso, muchos errores, deficiencias y debilidades del Partido tendrán que pagarse con sangre.

Después de iniciada la guerra de guerrillas, avanzará con el proceso de auge y caída, victoria y derrota de acuerdo con las leyes de la guerra. Pero es importante prestar atención al hecho de que una vez se ha levantado la bandera de la rebelión debemos estar decididos a no arriarla hasta el fin, y si lo hacemos sin tal determinación significa que pecaremos contra el pueblo y estaremos contra la teoría del MLM.

Luego de tener un Partido Comunista con un arma ideológica, línea política y medios de lograrla, el problema que queda es realmente el problema de iniciar la guerra popular. Sin tener claridad sobre esta cuestión, no es posible liberarse del reformismo. Ha sido probado por la historia que el pueblo juzgará positivamente todos los hechos históricos realizados por el bien del pueblo y cuando se hacen con una profunda creencia en el principio de que “las masas hacen la historia”.