De las
Obras Escogidas de Mao Tse-tung
EDICIONES EN LENGUAS EXTRANJERAS
PEKIN 1976
Primera edición 1962
Segunda edición 1963
(5a impresión 1976)
Tomo IV, págs. 157-58.
Digitalizado y preparado para el internet: Por el Movimiento
Popular Perú de Alemania, 1993.
Esta edición: Marxists Internet Archive, mayo de 2001.
INSTRUCCIONES DEL ALTO MANDO DEL
EJERCITO POPULAR DE LIBERACION DE CHINA
SOBRE LA NUEVA PROMULGACION DE
LAS TRES REGLAS CARDINALES DE DISCIPLINA
Y LAS OCHO ADVERTENCIAS
1. Las Tres Reglas Cardinales de Disciplina y las Ocho Advertencias de nuestro ejército[1] se practican desde hace muchos años, pero su contenido varía ligeramente según las tropas de las diferentes regiones. Ahora se las ha unificado y se las promulga de nuevo. Que se tome esta versión como norma para efectuar un profundo trabajo educativo y se las observe estrictamente. En cuanto a otros asuntos que requieren atención, el mando de las fuerzas armadas de las diferentes regiones puede establecer, de acuerdo con las condiciones específicas, puntos adicionales y ordenar su aplicación.
2. Las Tres Reglas Cardinales de Disciplina son las
siguientes:
1) Obedecer las órdenes en todas
las acciones.
2) No tomar de las masas ni una sola
aguja ni un solo trozo de hilo.
3) Entregar todas las cosas obtenidas
como trofeos.
3. Las Ocho Advertencias son las siguientes:
1) Hablar con cortesía.
2) Pagar con honradez lo que se compre.
3) Devolver toda cosa solicitada en
préstamo.
4) Indemnizar por todo objeto dañado.
5) No pegar ni injuriar a la gente.
6) No estropear los sembrados.
7) No tomarse libertades con las mujeres.
8) No maltratar a los prisioneros.
pág. 158
[1]Las Tres Reglas Cardinales de Disciplina y las Ocho Advertencias fueron reglas de disciplina formuladas por el camarada Mao Tse-tung para el Ejército Rojo de Obreros y Campesinos de China durante la Segunda Guerra Civil Revolucionaria. Constituyeron parte importante del trabajo político del Ejército Rojo y desempeñaron un gran papel en la formación del ejército popular, en la solución correcta del problema de las relaciones internas del ejército, en la unión de éste con las masas populares y en el establecimiento de la política acertada del ejército popular respecto a los prisioneros. Desde los primeros días del Ejército Rojo, el camarada Mao Tse-tung exigió de los soldados que hablaran cortésmente con las masas, pagaran con honradez todas sus compras, no hicieran levas para trabajos forzosos y no pegaran ni injuriaran a la gente. En la primavera de 1928, cuando el Ejército Rojo de Obreros y Campesinos se hallaba en las montañas Chingkang, el camarada Mao Tse-tung estableció las Tres Reglas de Disciplina: 1) Obedecer las órdenes en las acciones; 2) No tomar nada de los obreros y campesinos, y 3) Entregar a las autoridades toda cosa confiscada a los déspotas locales. En el verano de 1928, elaboró las Seis Advertencias: 1) Restituir las puertas utilizadas como tarimas para dormir; 2) Restituir la paja utilizada como colchones; 3) Hablar con cortesía; 4) Pagar con honradez lo que se compre; 5) Devolver toda cosa solicitada en préstamo, y 6) Indemnizar por todo objeto dañado. Después de 1929, el camarada Mao Tse-tung introdujo las siguientes modificaciones: la 2a regla tomó esta forma: "No tomar de las masas ni una sola aguja ni un solo trozo de hilo"; la 3a regla fue primero modificada así: "Entregar todo el dinero colectado", y luego: "Entregar todas las cosas obtenidas como trofeos". A las Seis Advertencias agregó dos más: "No bañarse a la vista de mujeres" y "No arrebatar a los prisioneros sus efectos personales". Tal fue el origen de las Tres Reglas Cardinales de Disciplina y las Ocho Advertencias. [pág. 157]