De las
Obras Escogidas de Mao Tse-tung
EDICIONES EN LENGUAS EXTRANJERAS
PEKIN 1976
Primera edición 1962
Segunda edición 1963
(5a impresión 1976)
Tomo IV, págs. 361-63.
Digitalizado y preparado para el internet: Por el Movimiento
Popular Perú de Alemania, 1993.
Esta edición: Marxists Internet Archive, mayo de 2001.
LOS REACCIONARIOS KUOMINTANISTAS
PASAN DEL "LLAMAMIENTO POR LA PAZ"
AL LLAMAMIENTO POR LA GUERRA
16 de febrero de 1949
Desde que el bandido Chiang Kai-shek lanzó el 1 de enero su ofensiva de paz, los héroes de la camarilla reaccionaria del Kuomintang no dejaban de proclamar profusamente su deseo de "acortar la duración de la guerra", "aliviar los sufrimientos del pueblo" y "anteponer la salvación del pueblo a toda otra consideración". Pero, a comienzos de febrero, empezaron de súbito a poner sordina al estribillo de la paz para entonar la vieja cantinela: "lucharemos contra los comunistas hasta el final". Así es particularmente el caso en los últimos días. En la "Directiva especial sobre la propaganda", dada el 13 de febrero por el Departamento de Propaganda del Comité Ejecutivo Central del Kuomintang a "todas las organizaciones y todos los periódicos del partido", se dice:
pág. 363
enero de 1949 contra el Partido Comunista de China en la declaración
del vocero del gobierno de Nankín. ¿Será que ahora
quieren ustedes retirar esta acusación, inscribirla en un cartel
y colgárselo del cuello como signo de honor? Ustedes son hombres
pletóricos de misericordia que "anteponen la salvación del
pueblo a toda otra consideración". Entonces, ¿por qué
cambian repentinamente de actitud y anteponen la salvación de los
criminales de guerra a toda otra consideración? Según las
estadísticas de su Ministerio del Interior, la población
de China no es de 450 millones de habitantes, sino de 475 millones; comparen
esta cifra con la de un centenar y tanto de criminales de guerra: ¿cuál
es mayor? Ustedes, héroes, han aprendido aritmética; tómense,
pues, la molestia de calcular bien según su manual antes de sacar
conclusiones. Si, sin hacer bien este cálculo, cambian apresuradamente
su fórmula originaria de "anteponer la salvación del pueblo
a toda otra consideración" -- fórmula buena que aceptamos
así como lo hace todo el pueblo -- por la de "anteponer la salvación
de un centenar y tanto de criminales de guerra a toda otra consideración",
entonces tengan cuidado, pues sin duda alguna no podrán mantenerse
firmes. Después de haber "llamado a la paz" durante varias semanas,
estos individuos, que no han dejado de repetir que se debe "anteponer la
salvación del pueblo a toda otra consideración", ya no están
"llamando a la paz", sino a la guerra. He aquí la desgracia de los
recalcitrantes del Kuomintang: combaten obstinadamente al pueblo, lo pisotean
desenfrenadamente y, de este modo, se encuentran aislados sobre el pináculo
de una pagoda; además, no se arrepentirán ni en sus últimas
horas. ¡Amplias masas populares del valle del Yangtsé y del
Sur de China obreros, campesinos, intelectuales, pequeña burguesía
urbana, burguesía nacional, shenshi sensatos y miembros del
Kuomintang aún con conciencia --, atención! Están
contados los días de los recalcitrantes del Kuomintang, que los
pisotean a ustedes desenfrenadamente. Estamos del mismo lado, ustedes y
nosotros. Este puñado de recalcitrantes pronto se vendrá
abajo desde su pináculo, y una China popular va a nacer.